Nueva erupción del volcán Etna: el momento en que un esquiador escapa de un escenario impresionante


El volcán Etna, de más de tres mil metros de altura, es uno de los volcanes activos en Italia que de tanto en tanto deja imágenes espectaculares en la costa este de Sicilia. Así ocurrió recientemente, cuando volvió a entrar en erupción.
En la tarde del sábado 27 de diciembre inició una serie de eventos registrados por el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología, encargado de la vigilancia sísmica del territorio italiano. El mismo anunció fuertes explosiones en el cráter noreste, las cuales “arrojaron material piroclástico por todo el cono”.
Este tipo de material se produce cuando surgen cenizas, rocas volcánicas, y gases calientes dentro de los propios volcanes, y es extremadamente peligroso.
Sin embargo, fue este último domingo que se pudo ver con mayor claridad los restos del fenómeno natural. Principalmente, las espectaculares explosiones de cenizas, humo y coladas de lava del Etna. Las mismas aparecieron entre la nieve que cayó por aquella zona de la isla más grande del Mediterráneo.
En junio de este 2025 el volcán ya había entrado en erupción. En aquella ocasión se pudo apreciar una enorme nube de ceniza y gas, luego de que una parte de su cráter se desplomara.
En la mañana del mismo domingo, las autoridades determinaron la gravedad de la situación con una alerta roja, especialmente para los vuelos en avión. De todas maneras, a pesar del denso humo, el aeropuerto de Catania-Fontanarossa continuó operando sin interrupciones, aseguró EFE.
Por otra parte, en esta nueva fase eruptiva en el volcán más alto de Europa, se pudo ver cómo un esquiador se dirigió rápidamente a tierra segura, con las cenizas detrás de sí.
Así aparece en una imágenes, un espectáculo para el resto de las personas presentes en el lugar. Tanto turistas como residentes pudieron observar espectaculares columnas de cenizas y humo, así como flujos de lava bajando por la nevosa superficie. Esta magma se desplazó hacia el este, hacia el Valle del Bove, y ya recorrió unos 1,8 kilómetros en dirección este, explicó INGV.
Este hecho resultó de suma importancia por ser muestra de la constante y vigente vitalidad del Etna. El mismo tuvo memorables explosiones con fuente de lava. Entre ellas, las ocurridas en 1998 y en 1999, cuando el cráter “Vorágine” registró dos erupciones “particularmente intensas”.
Además, en diciembre de 2015 se registraron erupciones con características similares a las mencionadas. De esta manera, se ubicaron entre las más potentes del Etna de las últimas dos décadas, en palabras del propio INGV.
Aparte de lo ocurrido el fin de semana pasado, la erupción anterior del volcán fue el 2 de junio de este mismo año. Aquel día los habitantes de las varias localidades cercanas vieron el reiterado fenómeno.
Pero la situación que sí llevó al cierre temporal de la terminal aérea de Catania fue la del 4 de julio y 14 de agosto de 2024. Por entonces, el volcán entró en erupción violentamente y provocó una nube de ceniza de 9,5 km de altura.
En 2021 también se registraron fuertes actividades eruptivas desde el cráter sureste. En síntesis, los numerosos episodios de este tipo que atravesó el Etna lo convierten en el volcán más activo del viejo continente.
Fuente: www.clarin.com



